Ayuso teme el sabotaje de la izquierda en los centros de salud en plena explosión de contagios
Que la izquierda convierta los centros de salud en campo de batalla electoral, con el perjuicio que eso supone para los ciudadanos, es uno de los temores presentes en el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. En los últimos días, desde la Comunidad de Madrid se vienen detectando diversas incidencias en varios centros- como colas injustificadas o falta de atención a los ciudadanos que llaman preocupados por su estado de salud- que ya se están investigando. El recuerdo del sabotaje en el Hospital Zendal sigue muy presente. Y fuentes del Ejecutivo regional no descartan que pudiesen repetirse hechos similares.
Este martes, la presidenta madrileña ya ha dejado entrever su preocupación. Preguntada por si «teme que la izquierda active a sus peones dentro de la Sanidad Pública para intentar perjudicarla», Ayuso no ha dudado en advertir de que «quieren convertir los centros de salud en sedes electorales».
«En algunos centros, no en todos, empieza a haber mucha tensión», ha señalado la presidenta de la Comunidad de Madrid en una entrevista en esRadio, donde ha explicado que «se utilizan los espacios de todos para colgar sus pancartas y no todos quieren trabajar y arrimar el hombro». Ayuso ha avisado de que desde la izquierda «van a intentar adueñarse, como han hecho siempre, de la Atención Primaria y de todo el sistema sanitario». «Y eso requiere de mucha pedagogía, vamos a tener que dar la batalla», ha proseguido.
El precedente del Zendal
A principios de año, el Coordinador de Gestión del Servicio Madrileño de Salud de la Comunidad de Madrid denunció una serie de actos de sabotaje en el Hospital Zendal, el gran centro sanitario para la pandemia. Entre ellos, el robo de diverso material instrumental y utillaje médico, en su mayoría, en los llamados «carros de parada» de las unidades de críticos. También se denunció la activación de la alarma de incendios, que instaba a la evacuación del edificio, y distintas llamadas anónimas.
La propia presidenta madrileña llegó a señalar directamente a allegados de Más Madrid como responsables de lo que calificó como una «vergüenza nacional». «Hurtos, roturas de puertas, interruptores… Desaparecen en el hospital y aparecen en sus medios afines, casualmente, al momento. No hay ese medicamento, y lo conocen ustedes los primeros. ¿En algún momento han condenado lo que está pasando en el Isabel Zendal? ¿O somos sanitarios o políticos según nos convenga o no?», espetó en la Asamblea de Madrid.
La pasada semana, la Fiscalía Provincial de Madrid remitió un escrito al titular del juzgado de instrucción número 9 de Madrid en el que solicitaba el sobreseimiento provisional de la causa abierta por estos hechos. El motivo es que, pese a que los hechos se reconocen, no se ha logrado identificar a los autores al carecer de grabaciones de las instalaciones. Como reveló OKDIARIO, los saboteadores del Zendal conocían bien el hospital, ya que sólo actuaron donde no había cámaras de seguridad.
En la última sesión en la Asamblea de Madrid, Ayuso recordó a Mónica García, portavoz de Más Madrid, que «estuvieron asustando a sanitarios y pacientes» y «alentaron manifestaciones con pacientes dentro». «La propia Fiscalía ha recogido en su escrito que está claro» que los sabotajes existieron, destacó Ayuso, pero no se ha podido comprobar la autoría.
«Mantener a sus liberados»
Este martes, la dirigente regional ha insistido en que «la izquierda siempre ha hecho de la Sanidad Pública el caballo de batalla» y que «lo han cogido como bandera, para intentar mantenerse y mantener a sus sindicatos y a los liberados sindicales y a esa gente que tienen instalada en el seno de la Sanidad , la Educación y otros muchos servicios públicos».
Ayuso ha admitido que «la Atención Primaria, como todo el sistema, ha soportado una carga extraordinaria, y ahora sobre todo lo va a hacer porque casi todos los ciudadanos están recurriendo de manera masiva a sus centros». Pero ha destacado también que «en Madrid el servicio hasta el momento ha sido excepcional». La presidenta madrileña ha recordado en este punto que desde su Gobierno se han reforzado las plantillas, se ha vuelto a contratar a todo el personal Covid al menos «hasta que pase la situación de tensión» y se seguirá en la misma estrategia.